Las fotos que cuelgo en este blog son sólo una excusa para mostrar todos aquellos lugares y personajes que por un motivo u otro más me atraen de esta ciudad caótica llamada Madrid.
Si quieres seguir leyendo mis historias puedes hacerlo aquí: http://en99palabras.blogspot.com.es/
domingo, 5 de abril de 2009
La cabra, la cabra,...
Foto tomada en la calle de los Estudios hace ya unos cuantos años.
Los titiriteros, una raza de gente que yo creo siempre perdurará. Yo recuerdo lo de la cabra, y antes los organilleros.
Ahora se suelen ver a quienes se acompañan de un acordeón, o tiran de una especie de órgano eléctrico portatil,aunque últimamente suelen ser inmigrantes rumanos. Otra cosa, más moderna, son los que permanecen quietos durante un largo tiempo, como estátuas vivientes, pero ésa es otra historia.
Hay quien considera a todos esos artistas callejeros como una especie de mendicidad encubierta...
Y que me decis de los que te despertaban con el teclado de camela los domigos por la amñana. Muy bien guardada la foto Miguel. Definitivamente es un bonito recuerdo de Madrid.
Lo he visto, lo he robado y lo he contado. Feliz día.
ResponderEliminarlo vi, lo vi..qué tiempos, ya no están por la calle verdad?
ResponderEliminarjejeje Todavía me acuerdo de aquella España.
ResponderEliminarUn saludo.
Dios, y si te pillaba por la mañana...
ResponderEliminarFeliz Domingo
¡Hola Miguel!
ResponderEliminarJAAAA, anda que no habrán pasado por donde vivía antes. Siempre les daba alguna moneda, a mi me resultaba gracioso el espectáculo.
Lo que pasa es que luego me entraban remordimientos pensando que podrían maltratar a la cabra.
¡Feliz lunes!
MIGUEL
Los titiriteros, una raza de gente que yo creo siempre perdurará. Yo recuerdo lo de la cabra, y antes los organilleros.
ResponderEliminarAhora se suelen ver a quienes se acompañan de un acordeón, o tiran de una especie de órgano eléctrico portatil,aunque últimamente suelen ser inmigrantes rumanos.
Otra cosa, más moderna, son los que permanecen quietos durante un largo tiempo, como estátuas vivientes, pero ésa es otra historia.
Hay quien considera a todos esos artistas callejeros como una especie de mendicidad encubierta...
Que cada uno piense lo que quiera.
Un saludito desde Valencia.
Yo lo he conocido también, y no hace mucho -hace un año- los he visto aquí, osea que todavía siguen existiendo.
ResponderEliminarDe pequeña recuerdo que se ponían bajo las terrazas y les echábamos monedas desde arriba. Qué cosas.
Y que me decis de los que te despertaban con el teclado de camela los domigos por la amñana.
ResponderEliminarMuy bien guardada la foto Miguel. Definitivamente es un bonito recuerdo de Madrid.