lunes, 6 de abril de 2009

Pontejos: cremalleras, historia y bostezos

Cuando era pequeño más de una vez escuché a mi madre decirme: "Voy a Pontejos con la vecina". Se trataba de una cita ineludible que se cumplía varias veces al año; después de la compra, las dos se entretenían dándole al hilo y al dedal. El famoso Pontejos, constituido por la calle Marqués Viudo de Pontejos y la Plaza de Pontejos, era y es una zona especializada en hebillas, cremalleras, automáticos, botones, hilos, y todo aquello que tenga relación con coser, zurcir y bordar.

El nombre de Pontejos se debe al militar y político coruñés, Joaquín Vizcaíno, que tuvo el honor de ser el primer alcalde constitucional de Madrid (años 1835 y 1836). Su título de marqués le viene gracias a su boda con Mariana de Pontejos y Sandoval, marquesa de Pontejos, y por tanto poseedora del titulo. Tras la temprana muerte de su esposa, Joaquín decidió incluir la palabra viudo antes de su título como homenaje a la fallecida.

Según los libros de historia, Joaquín Vizcaíno ha sido uno de los mejores alcades de la ciudad; este honor no le llega de regalo, sino gracias a las múltiples iniciativas que emprendió para conseguir que Madrid fuera una ciudad más moderna, menos caótica y menos sucia. Gracias a él se comenzaron a numerar las calles, situando los pares en la acera de la derecha y los impares en la izquierda, y se les puso nombre en sus dos extremos a cada una de de ellas

También instaló los primeros servicios públicos, mandó que se realizara un plano coherente de la capital, realizó importantes obras públicas de saneamiento y suministros y concluyó el tramo del Paseo de la Castellana que va entre Colón y Emilio Castelar. Además, fue uno de los fundadores de la Caja de Ahorros de Madrid, del Ateneo y del Casino Militar.

Tristemente su fulgurante carrera se vio frenada de forma drástica ya que un ataque cerebral le causó la muerte con sólo 50 años. Hoy en homenaje a este hombre se alza una estatua de cuerpo entero en la Plaza de las Descalzas, junto a la central de Cajamadrid. Además una fuente en la que aparece su busto se encuentra en la Plaza de Pontejos citada anteriormente.

Como se puede ver en alguna de las fotos, en cuanto llega el buen tiempo esta plaza es un típico lugar de reunión de gente con pocas cosas que hacer; que se dedican entre bostezo y bostezo a disfrutar del sol y de los transeúntes que pasan por la zona.

11 comentarios:

  1. Y entrar en la tienda, cuando eres un crío, era algo asi como descubrir la cueva del tesoro. Y a riesgo de equivocarme, en esa zona situo Galdos la casa de Jacinta de su novela "Fortunata y Jacinta". Como me gusta Madrid.

    Carpe Diem

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  2. Excelente informacion.

    Yo tambien recuerdo ir con mi madre a la tienda de Pontejos y si me portaba bien me compraba un pastel de merengue en la pasteleria que hay o que habia en la Puerta del Sol junto al despacho de loteria de doña Manoñita.
    Gracias por "activarme" unos recuerdos que los tenia semi-olvidados.

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  3. Recuerdo el gato negro, allí de jovencita iba yo para hacer mis cojines, con aquellas agujas gruesas y esos hilos también gruesos de colores infinitos.

    Bs

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  4. Acabo de llegar de pasar unos días fuera con la familia, y me he dado cuenta de que este post que dejé programado para qyer lunes 6 de abril, lo puse en el 6 de marzo.

    Lo coloco donde le corresponde

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  5. ¡Excelente post Miguel! Toda una lección de historia del marques viudo de Pontejos.

    Yo de pequeño, alguna vez, acompañé a mi madre a comprar en las múltiples tiendas de bordadeos que hay.

    ¡Un abrazo!

    MIGUEL

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  6. y a pesar de estar tan cerca de la Puerta del Sol, es un sitio realmente tranquilo. Me encanta sentarme allí.

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  7. Ohhhh no recuerdo ninguna época de mi vida en la que mi abuela (Modista) y mi madre (apañá que es ella) no hayan hablado de Pontejos ni hayamos ido a revolver. Me pareció siempre un lugar mágico que invita a soñar, a inventar...

    Besos

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  8. Puff! hace muchísimo que no paso por ahí pero en mis años colegiales pise Pontejos muchísimo...es el santuario para ciertas labores...Besos

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  9. Goya tiene un cuadro con una bella dama muy joven que es, creo, la Marquesa de Pontejos, quizá fuese la suegra de ese viudo? Tenía entendido que la de Goya marchó a Francia y se separó de su marido.

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  10. No sabía que había sido alcalde de Madrid. Yo he ido con mi madre allí a comprar cosas de costura. ¿Quién no conoce Pontejos? ;-)

    Un saludo Miguel.

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  11. Hola, he publicado la foto de la fachada de Pontejos en mi blog poniendo tu enlace, espero que no te importe.

    Un saludo y gracias!!!

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