Que el Metro de Madrid es uno de los mejores del mundo creo que es algo que está fuera de toda duda. Conozco las capitales de unos cuantos países europeos y puedo asegurar que en lo que se refiere a este medio de transporte tenemos muy poco que envidiarles. Es cierto que hay aspectos por mejorar, pero creo que las cosas buenas superan a las menos buenas. A continuación reproduzco una carta que apareció publicada en el diario gratuito ADN (edición Madrid) y que recoge algunos de los problemas que nos encontramos cuando viajamos en Metro.
En el metro de Madrid
Angel Ramón Pastor (miércoles 4-marzo-2009)
"¿Qué fuerte tía! La culpa fue del Dani. Sí, al final no fuimos, tía... Me quedé con la Bea y con la Sara, tía... pero qué fuerte es todo, tía...". No hay manera. Levanto la vista del libro y deseo que la elocuente criaturita se apee en la siguiente estación. Pero la pasajera de la rica sintaxis no tiene planes inminentes de evacuación, aunque sí experiencias que compartir a través del inalámbrico. Sopeso alejarme, pero de nada serviría, porque también hay otro elocuente pasajero, encorbatado y maletín en mano, que habla de tablas semanales, comisiones y balances.
Meto de nuevo la nariz en el libro. Releo dos veces el último párrafo. Está cerca el desenlace. Los detalles son cruciales. Estoy visualizando al protagonista... "No me lo creo, tía. Seguro que fue el Dani..." ¡Se acabó! Cierro el libro con amargura. Sin escapatoria. Fijo la vista en túnel y pienso lo vivificante de este transporte: retrasos, precios abusivos, aglomeraciones, hurtos, olores corporales... Añado a la lista los repetidores de móviles. Ya no queda ni un sitio sin cobertura en Madrid. Todos, cada vez más sólos.
"¿Qué fuerte tía! La culpa fue del Dani. Sí, al final no fuimos, tía... Me quedé con la Bea y con la Sara, tía... pero qué fuerte es todo, tía...". No hay manera. Levanto la vista del libro y deseo que la elocuente criaturita se apee en la siguiente estación. Pero la pasajera de la rica sintaxis no tiene planes inminentes de evacuación, aunque sí experiencias que compartir a través del inalámbrico. Sopeso alejarme, pero de nada serviría, porque también hay otro elocuente pasajero, encorbatado y maletín en mano, que habla de tablas semanales, comisiones y balances.
Meto de nuevo la nariz en el libro. Releo dos veces el último párrafo. Está cerca el desenlace. Los detalles son cruciales. Estoy visualizando al protagonista... "No me lo creo, tía. Seguro que fue el Dani..." ¡Se acabó! Cierro el libro con amargura. Sin escapatoria. Fijo la vista en túnel y pienso lo vivificante de este transporte: retrasos, precios abusivos, aglomeraciones, hurtos, olores corporales... Añado a la lista los repetidores de móviles. Ya no queda ni un sitio sin cobertura en Madrid. Todos, cada vez más sólos.
JAAJAA!¡Hola Miguel!
ResponderEliminarNo sólo pasa en el metro, también pasa en el autobús. En fin, que tiene que haber de todo.
No nos podemos quejar, tienes toda la razón, se puede mejorar mucho pero ahí está muy difícil, es fruto de la eduación y la cultura.
¡Un abrazo!
MIGUEL
¿La foto de los cubos no será una representación artísticas de esas vanguardistas? porque así, de sopetón me gustó la foto :P
ResponderEliminarPeores cosas se ven en el Reina Sofía
Estos usan el móvil de una manera, otros lo usan y te tienes que tragar su música, la de las televisiones...pero esta historia es genial jajaja y es sólo una cosa que va mal en el metro
ResponderEliminarEn el metro de Tokío se considera de muy mala educación y falta de respeto al prójimo hablar por teléfono en los vagones. Debe llevarse en silencio, y si quieres hablar te bajas en la siguiente y hablas todo lo que quieras. En el metro se lee, se duerme, se debe ir relajado y tranquilo.
ResponderEliminarEl metro de Madrid quitando x detalles como que x líneas se estropean a diario, que muchas estaciones son casi inaccesibles por tener escaleras (no mecánicas) infinitas, las interminables goteras de otras, etc. es una maravilla y una forma de comunicación casi básica, no? aunque le queda por mejorar, claro. Y a los que nos queda muchísimo por mejorar es a los usuarios, en civismo, educación y respeto.
ResponderEliminarbesos
Vivan esos cubos que recogen aguas. Me llevo la foto. Saludos
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con Cris, ese problema no es exclusivo del metro, si no que ese extiende a todos los lugares donde se reune gente. En las cafeterias hay veces que oyes más a los de la mesa de la esquina que a tu interlocutor. Debe ser un deje de la época de las corralas....
ResponderEliminarDesde luego la mala educación no es exclusivo del Metro, supongo que tendrá que ver algo nuestro carácter, aunque hay algunos que es para echarles de comer aparte.
ResponderEliminarPor cierto, respondiendo a Matritensis los cubos los encontré de forma casual en la entrada a la estación de Julián Besteiro (Metrosur) aunque como bien dices cualquiera con un poco de jeta podía haber hecho lo mismo, y decir que era arte.
Un saludo
Me gusta mucho este post, per ola carta al director no es nada realisat por dios! Retrasos?el metro vuela.
ResponderEliminarEs un tema intereasnte que con lo buen fotografo que eres sacases buenas fotos del metro........te sigo y te disfruto. Un abrazo
Miguel, que me gusta mucho tu blog. Eso pienso ;)
ResponderEliminar"¿Qué fuerte tía!” Así no hay quién se concentre, jajaja. Muy bueno. Sí, me parece que el metro es calcadito en todas partes.
Esa foto de los cubos, es estupenda. Le has sacado partido. Y, con tu permiso, el del comentario de si era arte de vanguardia, ¡ha estado “senbraó”! Una entrada muy interesante y divertida.
Un abrazo,
Margarita
puff eso de ir en el metro y que no te dejen leer tranquila es lo peor
ResponderEliminarUn abrazo
A mi la foto de los cubos también me encanta....
ResponderEliminarEn lo que me he movido por europa...compruebo que nuestro metro está "realmente bien". Eso esí, hay que aceptar que ir en metro...requiere a veces altas dosis de paciencia con, los que empujan, los que no dejan salir, los que no dejan entrar, los cabreados por no sentarse, los niño estrujados...pero tiene su encanto. Besos.
Jaja esta entrada es genial ¿Quien no se ha sentido así alguna vez viajando en transporte público?
ResponderEliminarSin embargo deberíamos tener en cuenta que la mayoría de esos problemas con los que nos encontramos al viajar en transportes público no es cosa del servicio, sino de los propios viajeros (entre los que se incluyen, por ejemplo, la suciedad en los andenes o el poner musiquita en el móvil para todo el vagón).
En fin, viajar en Metro puede suponer toda una experiencia y a veces hasta de riesgo, eso no hay quien lo pueda negar.
Yo, aunque tengo coche, me muevo en metro por Madrid. Siempre me ha gustado el metro. Lo que no me gusta es esa manía de hablar en voz alta con los móviles, o la estúpidez de algún directivo de Metro que ha puesto pantallas de televisión para inflarnos aún más a publicidad. Por favor, el metro era el único refugio donde poder leer a gusto!
ResponderEliminarEn el transporte publico es lo que hay.Es cuestion de educación (hablar a voces o a gritos por telefono es mala educacion) pero si alguine quiere que nadie le moleste que utilice ql transporte privado. Es lo malo de compartir cosas, que hay quein no sabe
ResponderEliminaroh guao... el de aqui tampoco es la gran cosa. pero el sistema ferroviario de alla tiene una ventaja, se une con toda europa...
ResponderEliminaraqui hay metro en caracas, en valencia y al parecer habra en maracaibo.. ninguno unido y son solo tres ciudades.... gran cosa...
No aguanto a este gente que habla a gritos por el móvil y encima diciendo chorradas. Un abrazo.
ResponderEliminarMe voy a vivir a Japón, gracias por el dato DDDD
ResponderEliminarEstupendas las fotos, me encanta la de los cubitos, dichosas goteras, las hay por todos lados.
ResponderEliminarNo me gusta mucho el metro, no me gusta estar bajo tierra, pero hay que reconocer que es lo más rápido y seguro, casi siempre. Es estupendo viajar en él un domingo tempranito, casi sin gente, debo ser poco sociable, pero creo que lo peor del metro somos nosotros, los viajeros.
Besitos, Miguel.
Es que en el Metro de TOKIO Ssolo hay coberturas en las estaciones, dificil de hablar por movil sin bajarte...
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