Releyendo algunas entradas me he dado cuenta de que siempre que he hablado de los graffitis lo he hecho de forma negativa, por lo que en esta nueva entrada voy a ver si puedo invertir la tendencia. Conste que nunca he sido partidario de aquellos que embadurnan las calles con sus firmas o tags, pero debo reconocer que hay veces en las que los graffiteros mejoran el aspecto visual de algunos lugares, y creo que ese debe ser el objetivo a lograr.
Por ejemplo, junto a Gran Vía, varios graffiteros (Suso33 y rallito-X entre otros) han decorado la esquina que une las calles Desengaño y Ballesta con algunas de sus obras (fotos 1,2 y 4). Allí, junto a las prostitutas que intentan ganarse los cuartos con el cliente de turno, han plasmado una sucesión de dibujos que bajo mi punto de vista mejoran en mucho a los ladrillos existentes hasta entonces.
Se trata de una iniciativa del proyecto TriBall (Triángulo de Ballesta) que busca transformar la zona y convertirla en un barrio bohemio en el que desaparezcan las drogas y la prostitución. Un proyecto loable pero muy difícil de lograr.
De igual forma, en algunas calles aledañas podemos encontrar otras obras decorando paredes o puertas de garajes. Este es el arte urbano que a mí me gusta, bastante alejado del que comentaba al principio, aquel en el que lo único que cuenta es dejar tu nombre embadurnando lo primero que venga a mano. Además para eso ya estuvo el mítico graffitero "Muelle", cuyas firmas seguro que recuerdan todos aquellos madrileños que ya cumplieron los treinta.
Por ejemplo, junto a Gran Vía, varios graffiteros (Suso33 y rallito-X entre otros) han decorado la esquina que une las calles Desengaño y Ballesta con algunas de sus obras (fotos 1,2 y 4). Allí, junto a las prostitutas que intentan ganarse los cuartos con el cliente de turno, han plasmado una sucesión de dibujos que bajo mi punto de vista mejoran en mucho a los ladrillos existentes hasta entonces.
Se trata de una iniciativa del proyecto TriBall (Triángulo de Ballesta) que busca transformar la zona y convertirla en un barrio bohemio en el que desaparezcan las drogas y la prostitución. Un proyecto loable pero muy difícil de lograr.
De igual forma, en algunas calles aledañas podemos encontrar otras obras decorando paredes o puertas de garajes. Este es el arte urbano que a mí me gusta, bastante alejado del que comentaba al principio, aquel en el que lo único que cuenta es dejar tu nombre embadurnando lo primero que venga a mano. Además para eso ya estuvo el mítico graffitero "Muelle", cuyas firmas seguro que recuerdan todos aquellos madrileños que ya cumplieron los treinta.
No hay nada tan negativo ni tan positivo. Todo tiene un término medio.
ResponderEliminarConcuerdo totalmente contigo: a esto si se le puede llamar arte. Lo otro es puro gamberrismo.
ResponderEliminarSoy partidaria de que se dieran permisos para adornar ciertas znas de la ciudad con graffitis y serigrafias de este tipo.
Bonitas fotos, como siempre.
Un abrazo.
Por una parte el TriBall y por otra ReS. Menudo lío, ambos me molan un huevo.
ResponderEliminarSaludos.
Pienso que los grafiteros son artístas urbanos expatriados por la gente que camina entre sus obras y mira con asco y desprecio...
ResponderEliminarOpino,que tendria que haber un espacio para ellos en todas las ciudades donde poder disfrutar de su arte..
Pienso que hay gentuza,si,como en todos los ambitos de la vida..eso no significa que podamos encasillarles a todos en un geto de opinión..
Por otro lado..me encanta tu blog...
..me parece sencillo pero muy personal..y la gente que rectifica posee el dón de la humildad y la sabiduria...
Un placer enorme
EO!!
ResponderEliminarQue tal?
Personalmente, pienso firmas y símbolos de los que te encuentras por las calles cada 3 pasos lo único que me hacen pensar es en los perros que mean cada esquina para marcar territorio y decir: Yo pasé por aquí. Esto no lo soporto.
En cambio cuando son obras de arte como estas... pues si llevara sombrero me lo quitaría. Incluso pienso que algunos ayuntamientos deberían pagarles los sprais para que puedan decorar nuestras ciudades.
Petunicus
A ti blog solo le falta la música del Sabina para complementar ese profundo aprecio que sientes por la ciudad.
ResponderEliminarSaludos desde el otro lado de la pantalla.
Yo no lo considero arte(¿Qué es arte?), ni mucho menos, pero, lo que has expuesto, se salva de la quema de todos esos pintamonas ensuciaparedes.
ResponderEliminarGuau.... algunos son preciosos.... a mi lo que no me gustan son los garabatos y pintadas, pero un buen graffiti es tremendo...
ResponderEliminarestos no los conocía
Son preciosos, parecen obras de arte. En este caso, el grafiti está muy bien. Un abrazo.
ResponderEliminarMe ha costado dejarte un comentario. Bien, creo que me voy a quedar un ratote en tu blog, puesto que vas a enseñar un poco Madrid sin querer y quiero enterarme de todo puesto que me voy a estudiar nueve meses.
ResponderEliminarCon respecto a los grafitis, hay algunos que son poesía urbana. En este caso me parece que la calidad pictórica es notable y loable, y sí, este tipo de cosas tiene un acogedor encanto que transforma el espacio urbano.
Te mando muchos saludos y seguiré por aquí.
Fantásticos, todos...acabo de descubrirte y creo que me voy a pasar mucho, mucho por aquí.
ResponderEliminarLas visiones, diferentes, de Madrid me apasionan...soy un madrileño desafectado..
Es que hay graffitis y graffitis, los que se limitan a una firma o a un dibujo chapucero que ensucia una fachada me cabrean, pero si son consentidos en fachadas privadas y currados me gustan, todo lo consentido está bien, ¿no?
ResponderEliminar¡son geniales! siempre pienso que debería haber sitios especiales para estas obras de arte (lo son en cierto modo)
ResponderEliminaruff sí, Muelle, ¿qué habrá sido de él?
Un abrazo!
aaaaa yo no los he visto, sniff, pero me encanta el de caperucitaa
ResponderEliminarsalu2
Hala!! Qué copiota! Mierda! tenía que haber llegado yo antes!
ResponderEliminarJajajaja, es broma, es que si no suelto una tontería no me quedo agusto.
Qué bonitos. Hace muchísimo que no paso por ahí, así que no los había visto.
Me he leído casi enterito lo de Muelle. Jobar, cómo recuerdo el verlo por todas las partes. Es historia ya. Sería una pena que acabasen con las pocas pintadas de Muelle que quedan.
Bsos Miguel!!
Soy un firme defensor del graffiti como expresión artística, como una forma de arte al alcance de todos y que embellece las ciudades y las hace ganar enteros. Por supuesto no me refiero a las firmas o tag claro. Tengo que pasarme a verlo antes de que lo borren, que en España somos especialistas...
ResponderEliminarUn saludo a todos!!!
La calle Ballesta tiene para los madrileños unas connotaciones un tanto "extrañas", razón por la que hace mucho tiempo no pasaba por allí, pero hay que reconocer que esta decoración que tiene ahora es bonita, muy llamativa y alegre.
ResponderEliminarHay grafittis que son verdaderas obras de arte.
Besos, Miguel.
Es que una cosa son las pintadas sin más valor que el de ensuciar, que no suelen respetar señales de tráfico, indicadores, ni fachadas limpias, y otra cosa son los graffitti como estos, que regeneran muros sin valor y tienen auténtico arte. Y eso que yo colecciono fotos de pintadas, cuando son de frases ingeniosas; pero reconozco que son una porquería. En cambio estos se lo curran a fondo.
ResponderEliminarYo creo que en el graffiti no es posible separar la parte artística del vandalismo. Son distintas caras de una misma moneda.
ResponderEliminarSeguro que Suso33 empezó haciendo taqueos (firmas).
Bueno chete pues espero que sus seguidores tomen nota y vean que realmente el arte está en lo que hace ahora y no en lo que hacía al principio.
ResponderEliminarSaludos