Marlon Brando, Paul Newman, Marilyn Monroe, Cary Grant, Ava Gardner, Gary Cooper, Meryl Streep, Sean Connery, Al Pacino, ... Todos estos actores que en su momento nos hicieron reir, llorar, o simplemente soñar, son ya historia en el 37 de Gran Vía.
Y es que desde hace unos pocos meses los grandes cartelones de la fachada, la pequeña taquilla, los aplausos de los espectadores, el olor de las palomitas, han dejado paso a las faldas, las blusas, la lencería o la cosmética.
Después de una largas obras el edificio, construido en 1928, que albergaba el cine Avenida y la sala de fiestas Pasapoga, fue inaugurado el pasado mes de septiembre como tienda de ropa. El cambio no ha podido ser más drástico: de albergar las mejores películas del momento ha pasado a convertirse en otra tienda más de la multinacional H&M.
Con una superficie superior a los 2.300 metros, en la remodelación del local se han respetado algunos de los elementos originales del edificio original. En el vestíbulo aún puedes encontrar los letreros indicando las puertas de las salas del cine, algunas pinturas en la pared, las escaleras de mármol o las grandes lámparas de araña. Sin embargo los asiduos del cine echan a faltar algunos otros detalles que parece ser han desaparecido para siempre.
Con esta transformación se vuelve a comprobar que aquello que se dijo en su momento de que la Gran Vía era el "Broadway madrileño" es ya simplemente una quimera. Como ya comenté hace un tiempo el impresionante auge de los grandes centros comerciales ha obligado a cerrar las salas de cine de toda la vida, que ya ni tan siquiera se sustituyen por teatros.
Adiós Broadway, bienvenida Fashion Avenue.
Adiós Broadway, bienvenida Fashion Avenue.
¡Qué lastima me dá Miguel! ¡GRandes cines y grandes teatros que se esfuman! Lástima..Besos y feliz jueves
ResponderEliminarLa verdad es que es una pena pero, por otra, la verdad es que han realizado un gran trabajo de adaptacion y la remodelacion es muy buena. ¿La culpa? no creo que sea de las grandes cadenas sino de nosotros espectadores que ya no vamos al cine, que hacemos que ya no sea negocio. Por otro esos precios abusivos de los cines ayuda tambien a que vayamos menos pero si ponen cosas interesantes, a precios adecuados las cosas cambiarian. No puede ocstar una entrada de cine lo mism o que un menu de restaurante, creo.
ResponderEliminarUn abarzo.
Cuantas veces habre ido yo a ese cine....
ResponderEliminarsnif, snif
Carpe DIem
Es una pena que los cines desaparezcan, pero, como dice Prometeo, los hacemos desaparecer cuando no vamos a las salas. Siendo así, creo que la rehabilitación que ha hecho HM es muy loable porque ha conservado la estructura del cine, la fachada, el vestíbulo, las escaleras. Si hubiera tirado las instalaciones interiores, aunque hubiera respetado la fachada, hubiera sido más lamentable.
ResponderEliminarY si hubieran instalado oficinas, un banco, algún otro negocio, no lo podríamos disfrutar los peatones.
¡Una pena! Nos hemos vueltos demasiado cómodos y queremos ir en coche hasta la sala, comer allí también, y eso ha sido el fin de las salas. Han cambiado el gusto de las personas.
ResponderEliminarLa Gran Vía está muerta, ahora no es más que una calle popular, pero de cartón piedra.
Una pena, repito.
¡Un abrazo!
MIGUEL
Cada vez van quedando menos...
ResponderEliminarSin embargo otros aguantan...
Hoy publicaré algo sobre el Teatro Lara, conocido por su forma y su belleza como La Bombonera...
lo he visto por dentro yo tambien
ResponderEliminary me parece una pena
el espacio sigue siendo precioso, pero juntado con lo que han puesto
me parece vulgar
hace daño a la vista
un abrazo
Da pena, ¿verdad? Es como quitar un alma de cuajo.
ResponderEliminarYo no creo que ya no se vaya al cine, sino que como habéis dicho lo que haceos es ir a los grande scentros comerciales en los que después de ir al cine no squedamos a cenra, y antes hemos hecho unas cuantas compras. Nos hemos vuelto demasiado cómodos.
ResponderEliminarPor otro lado yho no puedo opinar sobre si ha quedado bien o no la reforma ya que no había estado nunca en el Avenida. Sí os puedo decir que algunos comentqarios que he léido y oído no están demasiado conformes con el resultado fina.
Saludos
Algunas veces pienso que vivo en otro mundo. No me había enterado de esto, una verdadera pena, tendré que ir a ver el crimen.
ResponderEliminarLas fotos, desde luego, son preciosas.
Un beso.
Qué pena. No lo sabía. Aunque reconozco que yo no soy de cine. Y siempre que he ido ha sido a los grandes sí. Pocas veces a los de la Gran Vía. Supongo que estas son las consecuencias :( :(:(:(
ResponderEliminarYo a los de la Gran Vía he ido poco, debo reconoerlo, pero está claro que sitios como éstos hay que intentar buscarles unas actividades que sean lo más acorde a lo que había anteriormente. Me refiero a teatros o similares.
ResponderEliminarSaludos