viernes, 15 de abril de 2011

Un Goya por una peseta

Estos días es noticia la detención de varias personas debido al timo de las cartas nigerianas. Pues bien, casualmente esta semana he encontrado esta noticia publicada en "La Vanguardia" un 2 de septiembre de 1913. En ella podemos darnos cuenta de que toda la vida ha habido listos e incautos, es algo inherente a nosotros.

Un Goya por una peseta
En la calle del Espíritu Santo suele establecer su puesto un vendedor de cuadros
viejos y objetos diversos. A dicho vendedor se acercó una mujer y le presentó un cuadro viejo y deteriorado, preguntándole si quería comprarlo. El hombre lo estuvo observando detenidamente con extrañeza de la vendedora, que no comprendía cómo aquel cuadro para ella de tan escasa importancia, merecía tanto interés.

Al fin dijo el comprador:
— ¿Cuánto quiere por el cuadro?
—Dos pesetas.
Iluminóse el rostro del comprador, y después de un regateo, hizo ver los muchos defectos del cuadro, que quedó vendido en una peseta.

Horas después la citada mujer pasó por la calle del Prado, y en el escaparate de una
tienda de antigüedades vio expuesto el cuadro que acababa de vender.y subió de punto su extrañeza, al observar al pie un letrero que decía: «Original de Goya.— 7.000 pesetas.»

Sin titubear penetró la mujer en el establecimiento y reclamó el cuadro, diciendo que se le engañó, pues ella no sabía que pudiera valer tanto el cuadro, y que Lo vendió por una peseta. El dueño del establecimiento contestó que él lo compró mucho más caro y nada tenía que ver con la venta primera. Promovióse un escándalo, tuvo que intervenir la policía y se avisó al juzgado, que se encargará de averiguar la autenticidad del cuadro para arreglar el conflicto"

Después no he encontrado ninguna noticia adicional que me dijera que es lo que pasó al final con el cuadro pero supongo que la muejr se quedaría con su peseta pero sin el cuadro.

2 comentarios:

  1. Miguel...¡nadie dá duros por pesetas!..Un besito y buen finde

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  2. Winnie0 en este caso me temo que la mujer si que los dio, pero puede que fuera demasiado tarde para darse cuenta.

    Besos.

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